18/04/2024
El gobierno municipal sigue en su empeño de mantener informados a los castellonenses sobre las obras de la Zona de Bajas Emisiones. Para ello, el concejal de Urbanismo, Sergio Toledo, continúa reuniéndose a pie de calle con vecinos, pymes y autónomos de toda la ciudad.
Tras recorrer la semana pasada el raval de San Félix y reunirse con la Asociación de Vecinos Raval de la Trinidad, la última cita ha sido esta tarde con los comercios de la calle Navarra, en obras desde el pasado 2 de abril. “Para el gobierno municipal es una prioridad que los vecinos de la ciudad sean los primeros en saber cuánto van a durar las obras o qué alternativas tienen para que estos trabajos no interfieran más de la cuenta en su día a día”, asegura el edil.
El concejal del área asegura que “este gobierno está a su lado por eso les escuchamos para poder mejorar los problemas que puedan surgir”. Toledo recuerda que “esta es una obra heredada del gobierno anterior, que el gobierno actual ha reorientado de la mano de los vecinos para mejorarla, con más plazas de aparcamiento y más zonas verdes, cumpliendo a su vez con las exigencias que marca Europa y sin perder la financiación de 8 millones de euros”.
Además, el edil insiste que “por decisión de este gobierno, este proyecto no restringirá al tráfico de vehículos ninguna de las calles integradas en el perímetro de la ZBE, solo en momentos puntuales si los medidores de la calidad del aire lo indican y sin afectar a los residentes que van a poder acceder a sus viviendas en todo momento”.
Las obras en la calle Navarra tienen una duración estimada de ocho meses. Mientras duren los trabajos se solicita la salida de los vehículos de la zona antes de las 7:45 horas y pueden volver a entrar a partir de las 18:45 horas, momento en el que termina su jornada laboral. En este aspecto, el concejal de Urbanismo ha expresado que “queremos que los vecinos tengan la tranquilidad de que pueden entrar o salir de estas vías de manera puntual y, una vez dejen de trabajar las máquinas pueden circular sin problemas”.
Además, hay que señalar que dentro del proyecto de Zona de Bajas Emisiones, en la calle Navarra no se elimina ninguna plaza de aparcamiento.
Proyecto reorientado para mejorar la accesibilidad
Las calles serán todas de plataforma única y con aceras más anchas para poder disfrutar de la ciudad y garantizar la accesibilidad, con un itinerario para personas invidentes. Como detalle a resaltar, se aplicarán materiales fonoabsorventes para reducir el ruido y fotocatalíticos para reducir la contaminación.
Además, con esta remodelación de la ciudad se recuperan 219 plazas de aparcamiento para los vecinos, respecto al proyecto del gobierno anterior y se incorpora más arbolado y zonas verdes que harán que sea más agradable pasear por Castellón.
Estas obras, que han empezado a ejecutarse por fases y deberán estar finalizadas el 31 de diciembre de 2025, forman parte del proyecto rediseñado de la Zona de Bajas Emisiones. Una actuación que se está llevando a cabo en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) financiado con los fondos europeos Next Generation, para mejorar la accesibilidad de la ciudad de Castellón.